lunes, 15 de diciembre de 2008

JUNTOS

Este ha sido nuestro primer encuetro con vosotros. A través de los chicos que no queréis.

Nosotros también nos hemos dado cuenta de que con ellos la escuela es más difícil. Alguna vez aparece la tentación de sacárselos de encima. Pero si ellos se pierden, la escuela ya no es escuela. Es un hospital que cura a los que están sanos y que rechaza a los enfermos. Se convierte en un instrumento de diferenciación cada vez más irremediable.



¿Y vosotros os atrevéis a representar este papel en el mundo? Entonces llamadlos de nuevo, insistid, volved a empezar desde el principio a pesar de que os tomen por locos.

Es mejor parecer loco que ser un instrumento del racismo.



Alumnos de la Escuela de Babaria. Carta a una maestra.

Vic: Eumo Editorial, 1998, p.14 (texto original de 1967)